Una de las preguntas que más nos hacemos en este rincón de la web es ¿Por qué decidiste estudiar ingeniería?
En mi caso, me he dado cuenta que no fue una decisión que haya tomado de un día para otro. Cuando haces una pausa para responder a esta pregunta y miras atrás, te das cuenta que tu mente curiosa, soñadora, llena de imaginación, preguntas y con mucha hambre de aprender y salir adelante, se hizo su camino hacia la ingeniería hace mucho tiempo, probablemente en un cuerpo de niña.
Por esta razón, en un día cuando celebramos especialmente a la niñez, no podía dejar pasar la oportunidad de agradecerle a esa niña que siguió sus sueños con el entusiasmo, esfuerzo y dedicación necesarios para traernos a este camino llamado ingeniería.
Un camino que no ha sido fácil pero en el que día con día vamos aprendiendo a superar los diferentes retos que se nos presentan, donde aprendemos y tenemos la fortuna de poder compartir e inspirar a más niñas y mujeres como nosotras.
Gracias y felicidades a todas las niñas que un día soñaron en grande, persiguieron sus sueños y nunca dejaron de creer en si mismas.
Carta a mi niña, futura ingeniera
¡Hola niña! ¿Cómo estás? Antes que nada, espero que mi mensaje te encuentre con bien.
Hoy es un día especial en el que quiero recordarte que tú eres especial. Naciste con madera de campeona y siempre debes mantenerte fiel a ti misma.
Se lo mucho que te emocionas al imaginarte lograr grandes cosas ¿Y sabes qué? Esa curiosidad que tienes y todas esas preguntas que a veces no tienen respuestas, verás que cuando menos lo esperes la vida te las responderá de forma maravillosa.
Nunca pierdas esa creatividad y curiosidad que tienes dentro, porque son cualidades valiosas que te ayudarán a descubrir cosas nuevas y a superar cualquier obstáculo que puedas encontrar en el camino.
¡Qué gran sueño tienes! Convertirse en ingeniera es un objetivo maravilloso y emocionante. Si sigues trabajando duro y perseverando, puedes lograrlo.
Recuerda que no hay límites para lo que puedes lograr si te lo propones. Si tienes un sueño o una meta en mente, trabaja duro y persevera para alcanzarla.
No te preocupes por los errores que puedas cometer en el camino, ya que son una oportunidad para aprender y crecer. Sé amable contigo misma y con los demás, y siempre busca la felicidad y la positividad en todo lo que haces.
Recuerda que no hay límites para lo que puedes hacer si realmente te lo propones. No te mentiré, convertirte en ingeniera no será fácil, requiere mucho esfuerzo y dedicación, pero también es una carrera muy gratificante y desafiante.
Por favor, no te desanimes ante los obstáculos que puedas encontrar en el camino. En lugar de ello, utilízalos como oportunidades para aprender y crecer.
No importa cuánto crezcas o cuánto cambies, siempre lleva contigo a esa niña que eres en tu corazón. Mantén esa chispa de alegría y entusiasmo por la vida, y verás cómo puedes hacer cosas maravillosas.
Recuerda que eres valiosa, hermosa y capaz de cualquier cosa que te propongas. ¡Siempre sé fiel a ti misma y sigue tus sueños!
Tú puedes ser lo que quieras ser si te lo propones ¡Sigue adelante y conviértete en una gran mujer ingeniera!
